El Festival de Imbolc -Lá Fhéile Bride- (Inicios)

Susana Ortega

Relatos llenos de Magia.

El trayecto lluvioso desde Dublín apenas le permitía ver la carretera. Al abrir la puerta del jardín observó como una campanilla de invierno le daba la bienvenida. La noche era fría. Suspiró y se dijo- Lá Fhéile Bride (imbolc).-

Las noches oscuras del invierno siguen su curso. Esta última noche es apenas dos minutos más corta que la de ayer y sin embargo, se percibe un ambiente diferente. Imbolc se acerca

Imbolc es un festival en la temprana irlanda y otros países celtas, también conocido como Oimelc. Esta vocablo parece que proviene de la primera leche que las ovejas dan a sus corderos.

Cintas con los anhelos de peregrinos en el pozo de Brigit

Una festividad relacionada con los primeros comienzos.

Este día también se celebró en Irlanda como la festividad de Brigit. El calendario cristiano la festividad fue reemplazada por otra “la candelaria”, con el simbolismo de velas y procesiones.

¿Pero que se celebra en Imbolc? ¿Qué se percibe? ¿Qué acontece…?

Si observas a tu alrededor la tierra se está despertando y la atmósfera contiene todo el potencial de manifestación posible para los ciclos que vienen.

“Saoirse no pudo contener su emoción al entrar en la casa de su abuela. Lagrimas brotaron junto a los recuerdos. ¡La echaba tanto de menos!. El tiempo se paró. Prendió el antiguo candil y aunque el polvo invadía muebles y estantes, se sintió en “casa”, en  un hogar. Buena idea la de comprar a sus hermanos su parte en la casa de la abuela.”

El invierno ha otorgado un tiempo de reflexión que va llegando a su fin, nos ha regaló la acción de soñar. Ahora, es tiempo de despertar para encaminar los pasos hacia la parte de acción del año. Culminan los procesos alquímicos internos. Susurras tus anhelos a la noche, a la luna para prender la chispa de vida que contienen, primer paso para que se manifiesten.

En los mitos de la antigua Europa, de formas muy parecidas, quedan reflejados el despertar de la temprana primavera. En la mitología griega, Perséfone regresa del Hades al encuentro con su madre, Demeter. En la tradición nórdica, las Nornas despiertan después de la época oscura del ciclo anual.  Es tiempo de comenzar a tejer los proyectos que vendrán. Los romanos paganos adoraban a Juno Februata, diosa de la fiebre del amor...En el cristianismo, la candelaria sustituyó a la antigua festividad celta por el de la purificación de la virgen María.

“Durante todo el fin de semana estuvo recogiendo, limpiando, rememorando. Los recuerdos sobre las limpiezas del hogar que se hacían en esa casa antes del festival de Bride la impulso y dió un significado diferente a la limpieza que estaba realizando.  En la tarde del domingo, recolectó juncos y recogió agua en del pozo santo; Espolvoreó con sus dedos unas gotas de esta agua por todos los rincones de su aseado hogar. Encendió el fuego de la chimenea y dio la Bienvenida a la doncella de la primavera (Bride) en su casa. Se sintió emocionada y satisfecha.”

La naturaleza despierta y encuentras signos de este despertar en cualquier lugar donde posas tu mirada. El invierno se aleja, dejando paso a la energía primaveral. Prepárate para los cambios que vendrán, planta tus semillas, tus anhelos y tus sueños para que germinen y salgan adelante.

La energía del inconsciente emerge. Es por este motivo que este tiempo del año se dedicó a la iniciación y la sanación. Además de que la inspiración y la adivinación se reactivan.

En cada uno de nosotros yacen las semillas de los nuevos caminos que nos gustaría comenzar, toma la fuerza de la naturaleza para que vayan tomando fuerza y seguridad.

Tomó entre sus manos los juncos. Cerró los ojos e inspiró profundamente. Comenzó a tejer una cruz de Brigit, tal como su abuela le había enseñado. Mientras sus manos tejían, dejó a su mente que divagará para empezar a visualizar todo lo que quería atraer a su nuevo hogar. Dos gatitos aparecieron en su mente y cada célula de su cuerpo se llenó de amor, celebraciones con amigos, un dormir placentero, diversión, felicidad… Se tomó su tiempo, encendió una vela y dejo la cruz junto a cuaderno en blanco en el alfeizar de la ventana.  Esa noche recibiría la bendición de la antigua diosa Brigit, cuando esta pasara.

Imbolc se celebra la noche del 31 de Enero/1 de Febrero, aunque para mi la vibración más mágica es perceptible con la luna nueva en acuario. Espero esta noche al igual que una niña pequeña espera a los reyes magos. Al percibirla me sumerjo en las las profundas raíces del ciclo anual que comienza. La vibración de renovación regenera aquellas energías que están gastadas en mi cuerpo y en mi ser; me inspiro y plasmo en un cuaderno, con un dibujo o bajo cualquier forma expresión que se me ocurra, mis anhelos tanto los terrenales como los espirituales.

Que la vibración de los nuevos comienzos renueve tu ser;

Que seas consciente de lo que quieres

Que tus anhelos arraiguen y crezcan con fuerza.

Disfruta del nuevo ciclo cósmico que comienza.

Con Amor Feliz Imbolc,

un guiño de hada, de hada peregrina

© Susana Ortega

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